Caminos rurales, un factor limitante para la actividad Fuente: Archivo
Me especializo en el estudio de soluciones innovadoras para tratar desde la construcción, las problemáticas que presentan los caminos urbanos y rurales no pavimentados a nivel internacional. En mi paso reciente por Argentina, tuve la oportunidad de compartir las últimas tendencias en cuanto a materiales que se están desarrollando para mejorar su transitabilidad y mantenimiento.
El deterioro de los caminos no pavimentados es un problema común en todo el mundo. Su mal estado, por lo tanto, acarrea consecuencias para el desarrollo de las actividades comunitarias y productivas.
Según los datos relevados por la Comisión de Caminos Rurales en Argentina, el 90% de la producción se traslada por vía terrestre y el 88% de estos caminos no están pavimentados, por lo tanto, registran un alto grado de intransitabilidad permanente o semipermanente. Solucionar los problemas que genera el mal estado de las carreteras se ha convertido en un desafío y una meta en diferentes países.
Por ejemplo, en Argelia y Egipto se estabilizan con hormigón compactado que es aplicado con rodillos y en Marruecos se utiliza una técnica denominada “reciclaje en frío”. En Polonia, por ejemplo, existen asociaciones de autopistas que se encargan de mantenerlas; el Reino Unido que establece políticas de pavimentación regional o Canadá que opta por la conocida PPP (participación público privada).
Actualmente la tendencia global es el diseño, producción e implementación de soluciones sostenibles e innovadoras para la mejora y habilitación de caminos, que a su vez, aborden otros desafíos como el sobrecosto, la calidad y la durabilidad de los materiales utilizados.
La innovación se da a partir de la utilización de ligantes hidráulicos especiales para los caminos rurales que, a diferencia de las clásicas reparaciones, ocasionan conjuntamente estabilización de suelos y ahorro tanto en los costos de mantenimiento a mediano y largo plazo, disminuyendo el impacto ambiental a partir de mitigar la huella de carbono y utilizar recursos naturales renovables.
Mi trabajo me permite conocer los productos que se están desarrollando en alrededor de 30 países, principalmente con materias primas locales. A diferencia de otras propuestas, los ligantes hidráulicos son fabricados con los materiales cementicios disponibles.
Cada solución es formulada para responder a las características particulares del suelo y el clima de cada lugar. De este modo, las posibilidades son infinitas y puede diseñarse un ligante para cada región. Para poder diseñar y producir estas soluciones adaptadas de manera local es fundamental contar con metodologías ágiles de trabajo, que permitan aplicar la experiencia técnica y los resultados reunidos a nivel internacional y así acortar los tiempos de desarrollo.
El autor es doctor en ingeniería civil y gerente de Proyectos Viales de LafargeHolcim